miércoles, 2 de octubre de 2013

1,2 millones de pesos sería la multa por 'volarse' un pare

En propuesta enviada al Congreso, Gobierno plantea severos castigos para 'conductores temerarios'. Multas de hasta 1,2 millones de pesos, inmovilización del carro hasta un mes y suspensión de la licencia hasta por cinco años. De ese calibre serían las sanciones impuestas, según una propuesta que el Gobierno acaba de enviar al Congreso, para castigar a los 'conductores temerarios'. Es decir, para aquel que maneje con un nivel superior a los 0,20 mg de alcohol, bajo el efecto de las drogas o a más de 80 kilómetros por hora en las ciudades y a 120 kilómetros en las carreteras habilitadas para ello, aunque tales conductas no hayan ocasionado ningún accidente. Los mismos castigos se aplicarían a los que violen señales de ‘Pare’, semáforos en amarillo o en rojo y para los que manejen en contravía, sin licencia de conducción o realizando los famosos 'piques'. En una comunicación al Congreso presentada por el Consejero Presidencial para la Seguridad, Francisco José Lloreda, el Gobierno señala que no solo los conductores borrachos son responsables de la alta accidentalidad en las vías y por eso plantea severos castigos que irían aumentando a medida que el infractor acumula comparendos. Esos castigos también aumentan de acuerdo con la gravedad del accidente: si se ocasionan daños a bienes de terceros (en la práctica, un choque simple), la multa se elevará hasta 1,8 millones de pesos y la inmovilización llegaría a los tres meses. En casos de accidentes con heridos o muertos, la multa llegaría casi a los tres millones de pesos y los carros quedarían inmovilizados hasta por un año. La licencia podría suspenderse por diez o quince años, además de los castigos penales. En este campo, la 'conducción temeraria' que sea causa de muertes o lesiones tendrían un agravante como 'dolo eventual', lo que prácticamente aseguraría que el responsable fuera a la cárcel. Hoy, la mayoría de casos se consideran culposos y por eso los conductores ebrios recuperan su libertad a los pocos días. REDACCIÓN JUSTICIA

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